Un amigo de “la casa” en El Patio de los Sueños

Un invitado muy cercano tuvo El Patio de los Sueños, en su más reciente edición, del 21 de noviembre de este 2017. Carlos René Aguilera, uno de los más destacados artistas plásticos santiagueros en los últimos años, aceptó la invitación del poeta José Orpí para compartir sus sueños, en un lugar que le resulta muy cercano.

El Primer Premio del VII Salón Nacional de Arte Religioso, y el haber actuado como jurado en otras ediciones, contribuyó a conformar una amistad que ha trascendido el mero acto artístico, para llegar a transformase en una familiaridad que convierte a este artistas en un amigo de la casa.

Carlos René y Orpí en El Patio de los Sueños

Así lo hizo saber no más comenzar el intercambio con Orpí, durante el cual fue posible conocer de su formación, su obra, la influencia de su padre (el maestro José Julián Aguilera Vicente), y esos sueños que hoy en día lo impulsan como creador.

Fue una tarde de lujo, en la que la poesía, la narración oral y la música, crearon singulares puentes en la conversación.

Como va siendo habitual, el anfitrión del espacio leyó un poema dedicado a la Virgen de la Caridad, tomado del libro La virgen que vino del mar; en este caso, los versos tuvieron la firma de la poetisa bayamesa Lucía Muñoz.

Bertha Ferrer y Georgina Soler, distinguieron una vez más con su presencia la tarde del Centro Claret. La primera, con hermoso relato en el que el amor se sobrepone a los más fantásticos destinos; y la segunda, regaló una pieza antológica dentro de la poesía de Nicolás Guillén.

Una agradable sorpresa fue la participación del declamador Elio Salas, quien homenajeó al maestro Luis Carbonell, con una de las piezas que popularizara el ilustre hijo de esta ciudad.

Vista de El Patio de los Sueños

El otro homenaje de la tarde lo ofreció el propio José Orpí, cuando leyó un poema de su autoría, dedicado al recién fallecido poeta santiaguero Eduard Encina. Versos que, según contó Orpí, lo despertaron en medio de una siesta, como una voz perentoria que le dictara esas líneas con que recordó a uno de los más destacados poetas jóvenes de nuestro país.

Por su parte, Carlos Javier Álvarez, integrante del Centro Claret, dedicó sentidas piezas trovadorescas de su autoría.

Mirtha Clavería, Directora de la Revista Viña Joven, no quiso dejar pasar la oportunidad de contar parte de esa historia común que enlaza a Carlos René Aguilera y su familia, con el Centro Cultural Claret y los Salones de Arte Religioso. En ese recorrido, Mirtha destacó la dimensión humana que distingue a Carlos René, y le agradeció públicamente por su amistad probada en las buenas y las malas.

La tarde-noche de este marte 21 de noviembre, cerró con otros dos momentos distintivos del espacio. Primero, Angelina, miembro de la parroquia, contó sobre sus sueños de llegar a dominar los sacramentos, en este nuevo camino que comienza como catequista. Y finalmente, Carmen López, condujo la sección en la que se invita a los presentes a demostrar cuánto saben sobre la Biblia.

Fue una tarde exquisita, de esas que solo se dan cuando los buenos amigos se reúnen a compartir sus sueños.